Equipo y orden contra once hombres y el caos absoluto. Así se puede resumir lo que diferencia al Atlético de Madrid del Valencia. En Mestalla, el cuadro de Simeone fue muy superior a su rival salvo en el final de la primera parte. Los locales están perdidos, sin guía y sin guión para los partidos, pero el mérito también fue rojiblanco ya que ganó al mismo Valencia que evitó las victorias en su casa de Real Madrid y Barcelona.
Sin Godín en la zaga, el Atlético sólo sufrió tras el 1-1 y no le duró mucho. Un gol de Fernando Torres desniveló la contienda y los puntos se marcharon a Madrid. Si hay un milagro en la Liga, los madrileños quieren apuntarse a él.
Exhibición de Griezmann y coraje de Cheryshev
Fue una primera parte compleja, de las que hacen intuir que el cartel de gran partido previo al mismo puede responder a las expectativas. Hasta el empate del Valencia, el Atlético había sido infinitamente superior a su rival. El conjunto rojiblanco se encierra en su campo en casi todos los partidos y si el rival cae en la trampa, Simeone y los suyos no hacen prisioneros.
La defensa del Valencia estuvo tan mal en la primera parte que al Atlético le costó muy poco romper su muro para lanzar ofensivas una y otra vez. Griezmann dio un máster de cómo colocarse en el terreno de juego para ser útil a su equipo y todo lo que tocó generó peligro. Es el Messi del Atlético. Atrás, Kranevitter aprovechó la titularidad para demostrar sus credenciales: todo lo que pasa por sus dominios es suyo y el argentino sacó el coche escoba a pasear.
Con el Atlético entonado, Mestalla se temía lo peor y antes del minuto 25 llegó el 0-1. Ante el Athletic fue Parejo el que recibió una severa pitada por perder el balón que originó uno de los tantos vascos y ante el Atlético sería turno para Javi Fuego. Presión de Vietto, balón dividido y Griezmann, el más listo con diferencia, sacó la zurda a relucir marcando el primer tanto del choque. El galo es oro y su cláusula de 100 millones de euros lo acredita.
Las cosas se habían puesto en bandeja para el Atlético de Madrid. Gol a favor, dominio del choque y rival despistado, sobre todo atrás, pero en esas circunstancias aparecen siempre los mejores jugadores, los que marcan las diferencias y esos fueron Alcácer y Cheryshev. El primero regaló una asistencia de genio con su cabeza y el segundo, para desgracia de los atléticos que tanto se han acordado de él este año, empató el choque con un potente zurdazo.
Al descanso se llegaría con empate a uno aunque la cosa podría haber sido muy diferente si Vietto, que realizó un gran choque, hubiese estado fino de cara a portería.
Fernando Torres y los cambios, claves
En la segunda parte, Mestalla esperaba que sus hombres mantuviesen la línea de la recta final del primer acto, pero esta temporada el feudo ché se topa una y otra vez con la cruda realidad. Sería el Atlético el único dueño de los tiempos del encuentro. Simeone y los suyos dominaron el balón, tuvieron paciencia a la hora de buscar el segundo y lograron su recompensa.
En el otro bando, la lesión de Cheryshev y una patada en la espalda de un alocado Siqueira sobre Vietto dejaban claro que no iba a ser otra noche para disfrutar en territorio valencianista.
Tres nombres dieron sentido a la victoria del Atlético en la segunda parte: Simeone, Fernando Torres y Carrasco. El técnico argentino volvió a acertar de pleno en todas sus decisiones. Dos cambios, dos goles. El primero del renacido ‘9’. El ‘Niño’ empieza a sumar de cara a portería y el Cholo está encantado. Torres sería el encargado de hacer lo que Vietto no pudo hacer por falta de puntería y por Diego Alves: marcar. Jugada a balón parado, Giménez prolongó el balón y Torres, sólo, ponía cuesta abajo el choque. Ya van 102 goles.
El tanto madrileño terminó de matar al Valencia y a Mestalla, que tuvo que soportar las risas de algunos jugadores de su banquillo en plena derrota de su equipo y con el pobre Negredo siendo vacilado por sus propios compañeros. Increíble, pero cierto. Mientras, el Atlético a lo suyo. Jugada personal de Carrasco y 1-3. Antes, expulsión de Santos y plancha criminal, sin castigo de color rojo, de Feghouli sobre Lucas. Un banquillo se ríe y pierde, el otro salta al campo enchufado y gana. Así de simple.
1-3 final en Mestalla, incendio en el Valencia y nueva lección de madurez de un Atlético que si no consigue ganar la Liga, no venderá barata su segunda plaza.
Ficha Técnica:
Valencia, 1: Alves, Cancelo, Santos, Mustafi, Siqueira; Fuego (Negredo, m.83), Enzo Pérez (Danilo, m.46), Andre Gomes; Feghouli, Cheryshev (Rodrigo, m.61) y Alcacer.
Atlético de Madrid, 3: Oblak, Juanfran, Giménez, Lucas, Filipe Luis; Gabi, Kranevitter (Fernando Torres, m.63), Koke, Saúl; Griezmann (Oliver, m.88) y Vietto (Carrasco, m.68).
Goles: 0-1, m.24: Griezmann. 1-1, m.27: Cheryshev. 1-2, m.71: Torres. 1-3, m.85: Carrasco.
Árbitro: Álvarez Izquierdo (C.Catalán). Amonestó por el Valencia a Feghouli, y por el Atlético a Vietto. Expulsó al valencianista Santos, por doble amonestación, en el minuto 80.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 28 de la Liga BBVA, disputado en el estadio de Mestalla ante 50.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del exfutbolista del Valencia, Nando Yosu; del que fuera capellán del club, Elías Llagaría, y del periodista Gaspar Rosetty.
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