Pablo Iglesias utilizará su apoyo a los gobiernos autonómicos del PSOE para presionar a Sánchez

"Pedro Sánchez va a fracasar", repiten de forma machacona enPodemos. Por ello, los de Pablo Iglesias están ultimando la estrategia a seguir a partir de la segunda votación de investidura a Sánchez del próximo viernes 4.

En el partido morado ya no ve con tan buenos ojos unas nuevas elecciones, por lo que intentarán, por todos los medios, que el PSOErompa su pacto con Ciudadanos y vuelva a llamar a su puerta. Y para ello, van a utilizar a algunos de sus barones autonómicos. Concretamente a los de Aragón, Extremadura, Castilla La Mancha y Baleares: aquellos que hace unos meses facilitaron gobiernos socialistas.

Serán ellos los que las próximas semanas presionarán a los socialistas para que Pedro Sánchez cambie de pareja de baile y acepte como vicepresidente a Pablo Iglesias. Una estrategia que comenzará de forma clara a partir de la semana que viene, pero que estos días está empezando a dar sus primeras señales.

Una de las caras más conocidas del partido morado y secretario general en Aragón, Pablo Echenique, ha iniciado este movimiento. En un texto en EL País titulado "Aragón, el espejo encantado de Pedro Sánchez", el de Podemos enseña al socialista los pasos a seguir en España. "Si uno compara los resultados electorales autonómicos y estatales, Aragón parece un reflejo casi perfecto de España", dice el de Podemos.

Pero mucho más claro ha sido este viernes el barón de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina. Ha pedido al presidente autonómico Emiliano García-Page que se pronuncie "sin ambages ni ambigüedades" sobre "hacia dónde quiere ir y con quién" porque un pacto entre el PSOE y C's podría dejar "en papel mojado" los avances en la región.

"En este momento crucial hay que tener el coraje de ser claros, decir mirando a los ojos hacia dónde queremos ir y con quién", ha advertido García Molina, que le ha recordado a García-Page que necesita a Podemos para tramitar el proyecto de presupuestos de la Junta.

"Las medidas acordadas entre ambos partidos se pueden quedar en papel mojado si el Gobierno de la nación no cambia de color, el azul, o no cambia de políticas cambiando de color y si esas políticas se anaranjan", ha amenazado el de Podemos.

Y estas son sólo las primeras advertencias a los barones socialistas que gobiernan gracias a los de Pablo Iglesias.