Por Raquel Márquez
El presidente Mariano Rajoy avisa que no habrá cambios ni en la hoja de ruta ni en la dirección nacional. "El Gobierno y el partido están funcionando muy bien. Estoy satisfecho de cómo están funcionando las cosas", zanjó en vísperas de la reunión de este próximo martes con sus barones.
El partido llega a la Junta Directiva Nacional -que llevaba más de dos años sin convocarse- en un estado de convulsión debido al resultado electoral en Andalucía. Tras esto los barones autonómicos y locales se empezaron a distanciar de Rajoy acusándole de no hacer un diagnóstico real de situación, acto seguido llegaron los comentarios de María Dolores de Cospedal, por un lado, y Soraya Sáenz de Santamaríay Javier Arenas, por otro.
La brecha entre estos activos clave del PP era ya muy palpable internamente, pero nunca antes se había hecho tan explícita públicamente. En plena Semana Santa, dos portavoces de Cospedal apuntaron a quienes "perdieron las elecciones en Andalucía" como intrigantes y desestabilizadores. Y en la Moncloa no disimularon en privado su enfado.
Ante la Junta Directiva, Rajoy pedirá "el máximo esfuerzo y la máxima unidad" para tratar salvar las elecciones de mayo. Los barones reclaman desde más autocrítica y proximidad con la gente a reformular la estrategia contra Ciudadanos y no rehuir ningún debate ideológico, como afirmó públicamente Esperanza Aguirre. Pero Rajoy, sigue insistiendo en la baza económica aún reconociendo que ha fallado la comunicación y se ha descuidado el perfil político del partido.
"Lo mejor es hablar de las cosas que importan al conjunto de los españoles", avisó en su entrevista en RNE, llevada a cabo instantes después de conocerse los los históricos datos de paro y de la Seguridad Social del mes de marzo. Rajoy trató de reconducir el debate y poner la atención en la recuperación. "Entrar en discusiones de partido no aporta nada, no es la gran preocupación del presidente, que es el empleo", resumió.
Asimismo, descarta cualquier tipo de cambio en el organigrama del PP. "Está funcionando bien" y "estoy satisfecho en términos generales", explicó en RNE. Esto es que Cospedal seguirá siendo número dos, Carlos Floriano el director de campaña y Arenas continuará en calidad de vicesecretario general. "No va a haber cambios en el partido", sentenció Rajoy.
El presidente también dejó claro que tiene intención de presentarse a la reelección y que las elecciones generales se celebrarán antes de que concluya el año. "Él cree que lo está haciendo bien y que al final los españoles le darán su confianza. El problema es que antes vamos nosotros y a mí las encuestas me dicen que no llego y que, tras las andaluzas, Ciudadanos, que no tenía ni candidatos ni estructura, me quita muchos votos", según declaraciones de uno de sus barones autonómicos.
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