Vía El País
La primera temporada de Bajo sospecha llegó el lunes a su fin. El último capítulo de la serie protagonizada por Yon González y Blanca Romero fue visto por 3.748.000 espectadores, lo que significa que el 20,4% de la audiencia estuvo pendiente de la resolución del caso de la desaparición de la pequeña Alicia y la posterior muerte también de su prima Nuria. Ahora que el caso se ha cerrado, repasamos los aciertos y errores de la ficción televisiva.