Como en los viejos tiempos. La locomotora a vapor “Flying Scotsman” (El escocés volador), construida en 1923 y la primera en alcanzar los 160 kilómetros por hora, ha vuelto a recorrer Gran Bretaña tras un proceso de restauración de una década.
La máquina ha completado un recorrido de prueba en el noroeste de Inglaterra ante la emocionada mirada de entusiastas del ferrocarril.
“Es un símbolo de la era del vapor, mucha gente la conoce y la ama y ahora vuelve a funcionar. Todo este esfuerzo vale la pena. Tenemos mucho trabajo por hacer para que opere de nuevo en la línea principal. Ahora estamos haciendo pruebas. En febrero, volverá a funcionar en las principales líneas de todo el país”, dijo Bob Gwyne, del Museo Nacional del Ferrocarril.
En 1928, la locomotora inició el primer viaje sin paradas entre Londres y Edimburgo.
Más tarde, fue vendida a unos propietarios privados para exhibiciones en Australia y Estados Unidos. Gracias a una colecta pública, la maquina volvió a Gran Bretaña en 2004.
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