Al menos cuatro muertos y dos heridos graves en un tiroteo en una escuela de secundaria de Canadá. Ha ocurrido en la remota localidad de La Loche, al norte de la provincia de Saskatchewan, con 2.700 habitantes y poblada mayoritariamente por indígenas de la etnia dene.
En un principio, y tal y como el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, confirmó, desde la localidad suiza de Davos, se informó de que había cinco fallecidos. La policía federal canadiense asegura ahora que son cuatro, sin precisar el número de heridos.
“Esto es la peor pesadilla de todo padre. Cuando hablé con los líderes de la comunidad, me dijeron que la comunidad está conmocionada. Y los corazones de todos nosotros, en todo el país, están con las familias y con toda la comunidad”, ha declarado Trudeau.
Un sospechoso armado ha sido detenido. Según medios locales, el presunto autor de la masacre es un joven de La Loche.
Kevin Janvier, padre de una de las víctimas, ha explicado que el supuesto asesino “disparó a dos de sus hermanos en casa y luego se dirigió a la escuela”. Su hija, Marie Janvier, profesora de 23 años, se encuentra entre los fallecidos. “Estoy muy triste. No sé si el tirador conocía a mi hija”, ha declarado.
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