El partido de Albert Rivera, que se describe como de centro, lograría un 23 por ciento de los votos, por detrás del 27,1 por ciento del gobernante PP y superando al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en casi tres puntos, según el sondeo.
Podemos, la cuarta formación de una cámara que se perfila fragmentada, obtendría un 16,2 por ciento de los sufragios.
Con este resultado, que acaba con el bipartidismo que ha imperado en España las últimas décadas, Ciudadanos sería clave para apoyar la investidura de un eventual gobierno de Mariano Rajoy para los próximos cuatro años.
De cara a posibles pactos, seis de cada diez encuestados señalan que debería gobernar la lista más votada, tal y como defiende Rajoy, que con este resultado está lejos de la mayoría absoluta de hace cuatro años.
Podemos, la cuarta formación de una cámara que se perfila fragmentada, obtendría un 16,2 por ciento de los sufragios.
Con este resultado, que acaba con el bipartidismo que ha imperado en España las últimas décadas, Ciudadanos sería clave para apoyar la investidura de un eventual gobierno de Mariano Rajoy para los próximos cuatro años.
De cara a posibles pactos, seis de cada diez encuestados señalan que debería gobernar la lista más votada, tal y como defiende Rajoy, que con este resultado está lejos de la mayoría absoluta de hace cuatro años.
La alianza PP-Ciudadanos es la preferida para el 27,1 por ciento de los encuestados, mismo resultado que obtiene un eventual pacto PSOE-Podemos o PSOE-Ciudadanos. La coalición PP-PSOE es la que menos gusta a los españoles (5,2 por ciento).
El sondeo, realizado entre 1.500 personas entre el 24 y el 26 de noviembre, tiene un margen de error del 2,52 por ciento.
CUÁDRUPLE EMPATE EN CATALUÑA
En una encuesta independiente realizada por Feedback para La Vanguardia, cuatro partidos -Ciudadanos, ERC, PSC y Democracia i Llibertat (las siglas de los nacionalistas Convergencia Democrática para las generales)- están empatados a nueve escaños con una intención de voto de entre el 17,7 y el 16 por ciento.
Estas proyecciones apuntan a un auténtico terremoto electoral en la segunda comunidad autónoma más poblada de España, que podría ser decisiva para el Gobierno del país.
La extinta CiU, que en varias ocasiones fue el partido bisagra para la estabilidad del Gobierno central y que obtuvo 16 escaños en 2011, perdería casi el 50 por ciento de apoyos.
Además, la irrupción de Ciudadanos, que se colocaría como fuerza más votada, y de nuevos partidos de izquierdas como Podemos también asestaría un duro golpe al Partido Popular y al Partido Socialista, que perderían la mitad y un tercio de sus escaños, respectivamente.
Según la encuesta, los catalanes preferirían que el nuevo presidente de España fuera Pablo Iglesias, un 22,8 por ciento de las respuestas, seguido de Albert Rivera con un 20,9 y Pedro Sánchez con un 19,5 por ciento. No obstante, la gran mayoría, un 50,1 por ciento, cree que Mariano Rajoy seguirá en La Moncloa.
Las elecciones generales se producen con el telón de fondo de la deriva independentista iniciada por Junts pel Sí (la coalición entre Convergencia democrática y Esquerra Republicana) que aún no han conseguido formar gobierno en Cataluña y corre el riesgo de verse abocado a las cuartas elecciones en la región desde 2010.
El sondeo, realizado entre 1.500 personas entre el 24 y el 26 de noviembre, tiene un margen de error del 2,52 por ciento.
CUÁDRUPLE EMPATE EN CATALUÑA
En una encuesta independiente realizada por Feedback para La Vanguardia, cuatro partidos -Ciudadanos, ERC, PSC y Democracia i Llibertat (las siglas de los nacionalistas Convergencia Democrática para las generales)- están empatados a nueve escaños con una intención de voto de entre el 17,7 y el 16 por ciento.
Estas proyecciones apuntan a un auténtico terremoto electoral en la segunda comunidad autónoma más poblada de España, que podría ser decisiva para el Gobierno del país.
La extinta CiU, que en varias ocasiones fue el partido bisagra para la estabilidad del Gobierno central y que obtuvo 16 escaños en 2011, perdería casi el 50 por ciento de apoyos.
Además, la irrupción de Ciudadanos, que se colocaría como fuerza más votada, y de nuevos partidos de izquierdas como Podemos también asestaría un duro golpe al Partido Popular y al Partido Socialista, que perderían la mitad y un tercio de sus escaños, respectivamente.
Según la encuesta, los catalanes preferirían que el nuevo presidente de España fuera Pablo Iglesias, un 22,8 por ciento de las respuestas, seguido de Albert Rivera con un 20,9 y Pedro Sánchez con un 19,5 por ciento. No obstante, la gran mayoría, un 50,1 por ciento, cree que Mariano Rajoy seguirá en La Moncloa.
Las elecciones generales se producen con el telón de fondo de la deriva independentista iniciada por Junts pel Sí (la coalición entre Convergencia democrática y Esquerra Republicana) que aún no han conseguido formar gobierno en Cataluña y corre el riesgo de verse abocado a las cuartas elecciones en la región desde 2010.
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