Fallece a los 88 años uno de los últimos supervivientes del legendario triunfo contra Brasil.
Ayer jueves, 16 de julio, cuando se cumplen exactamente 65 del Maracanazo, falleció Alcides Edgardo Ghiggia de un paro cardíaco a los 88 años de edad. El futbolista entró en la historia en el minuto 34 de la final del Mundial de 1950, cuando contra todo pronóstico, los uruguayos se impusieron ante el anfitrión Brasil en un dramático partido celebrado en el Estadio Maracaná de Rio de Janeiro.
La derrota del Maracanazo todavía persigue a los brasileños como una maldición y constituyó un acto fundacional para Uruguay, que a pesar de su escasa población (3,3 millones de habitantes) tiene en su palmarés la victoria de dos Mundiales y 15 Copas América.
Ghiggia consiguó marcar el gol del desempate del partido contra Brasil, sumiendo a los brasileños en un profundo silencio que aún se recuerda como un momento de especial dramatismo.
"Solo tres personas en la historia han conseguido hacer callar al Maracaná con un solo gesto: el Papa, Frank Sinatra y yo", repitió toda su vida el delantero de una selección mítica, que después de su hazaña jugó en Italia y luego regresó a su país para formar parte de los clubes Peñarol y Danubio.
En sus últimos años Ghiggia vivió en la localidad de Las Piedras, en el departamento de Canelones, donde regentaba un modesto supermercado. Sus apariciones públicas eran frecuentes y acudía a ver partidos al Estado Centenario de Montevideo, donde siempre era aclamado por el público como un héroe.
Alcides Edgardo Ghiggia será velado el viernes en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo de Montevideo, el lugar donde se despiden a Uruguay a los grandes hombres y mujeres de su historia. La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) anunció en un comunicado la suspensión de todas sus actividades el viernes, sábado y domingo en señal de duelo.
Menos de una hora después de conocerse la noticia del fallecimiento, la Confederación Brasileña de Fútbol emitió un comunicado expresando “su solidaridad a los hermanos uruguayos”.
“Ghiggia se destacó por su desempeño en el campo y en el extremo. Hoy, el fútbol del mundo entero llora su partida”, añadieron los responsables del fútbol brasileño.
El expresidente José Mujica aseguró que"el nombre de Ghiggia va a ser imborrable" porque "no hay duda de que ese gol marcó la hazaña deportiva más grande de la historia del Uruguay y probablemente la mayor hazaña que se pueda haber escrito”.
El Senador Mujica recordó que escuchó la final del Campeonato Mundial de 1950 en "una vieja radio Edison, de aquellos muebles cuadrados grandes con lámpara" y que mientras transcurría el partido "estaba poco menos que metido dentro de la radio".
"Todo el Uruguay estaba vibrando y salimos como locos por las calles. Nunca vi tanta explosión y alegría resumida en la sociedad uruguaya; tal vez cuando se fue la dictadura, pero nunca vi tanta alegría resumida en un pueblo", dijo el expresidente de Uruguay aMontevideo Portal.
Eduardo Ache, presidente de Nacional, uno de los principales equipos de fútbol de Uruguay, aseguró que Ghiggia demostró “que en el fútbol todo se puede, que no hay grandes y chicos, que con esfuerzo y sacrificio se puede ganar”.
“Ni el más perfecto director de cine podía haber encontrado para el final de la obra Maracanazo este desenlace. De los 44 jugadores de aquel día 16 de julio, 22 estaban en la cancha y 22 en la tribuna, y el único sobreviviente de ese grupo de hombres era él. Justamente él, el mejor jugador de ese Mundial porque fue el único jugador que convirtió goles en los cuatro partidos que disputó Uruguay. Así que Ghiggia muere en un aniversario redondo, 65 años después de aquel gol histórico, quedando para siempre ligado a esa hazaña”, asegura el escritor Atilio Garrido, autor de Maracaná, la historia secreta.
Para Garrido el jugador forma parte de una genealogía de jugadores uruguayos que desde 1900 triunfaron en los campos de fútbol hasta llegar a hombres como Luis Suárez o Edinson Cavani
No hay comentarios:
Publicar un comentario