Por Raquel Márquez
Este viernes el Consejo de Ministros aprueba el decreto de flexibilización de las carreras universitarias. Los grados universitarios que cursan más de 1,5 millones de estudiantes duran cuatro años y los másteres posteriores uno, hasta ahora. El nuevo proyecto, que ha provocado protestas desde todos los sectores, supone abrir la posibilidad de que las carreras duren tres años y los másteres, dos.
Profesores de diferentes sindicatos educativos se concentrarán este hoy y mañana a mediodía frente a los rectorados de las principales universidades españolas contra su implantación.
El Ministerio de Educación lo considera su gran cambio universitario y asegura que eso nos permitirá tener grados de duración similar y equiparable al resto de Europa. Los rectores, el Consejo de Estado, los estudiantes y los sindicatos rechazan el cambio por distintos motivos: consideran que aún es pronto para hacerlo puesto que el plan Bolonia prácticamente acaba de empezar y aún no se ha podido evaluar su rentabilidad.
Si se generalizan los másteres de dos años, los estudiantes tendrán que pagar más por la educación superior ya que los precios de los másteres son superiores a los de un curso de grado. Además una reforma que permita a cada universidad poner una duración diferente supondría un “caos” y le recriminan al Ministerio que no negociara con todos los implicados.
¿Hasta cuando va a continuar este Gobierno cambiando los planes de estudios? Tanto cambio, y tan seguido, no va a suponer una mejora sino todo lo contrario, va a terminar ralentizando el acceso al mundo laboral de los universitarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario