El Cholo será la estrella en una Liga de rotaciones

Vía Marca

El Atlético vende, pero compra. Y no sé aún -no tengo criterio suficiente sobre todas las incorporaciones- si está haciendo mejor lo uno que lo otro, pero no suela mal.

Con la Eurocopa al fondo y el calendario comprimido, va a ser un año de técnicos.

La baja de Arda, sobre todo, parece la más importante, pero me fío y mucho del Cholo. Difícilmente se le habrá colado alguno que no tenga contrastado. Jackson, Vietto, Filipe, Savic, Carrasco, quizá Motta,… más los Koke, Griezmann, Torres, Oblak, Godín… Un equipo con buena pinta de verdad. Estamos en lo de siempre, si acabará siendo una Liga de dos o de dos más tres: Atlético, Sevilla, Valencia…

Quizá es muy pronto para meternos ya en esto. En plena pretemporada, hay muy pocos asuntos claros, pero hay uno que defiendo desde hace unos días y es que va a ser una campaña de entrenadores.

Con la Eurocopa al fondo y el calendario de Liga, Copa y Champions comprimido, va a ser un año de técnicos. Los que mejor sepan gestionar el vestuario, con sus rotaciones verdaderas, no sólo las de los actores secundarios, serán los que lleguen al final de la campaña en mejores condiciones.

Va a ser un año de rotaciones y de muy buena preparación física

Las últimas diez jornadas ya se sabe que son las definitivas. Y en este ranking de entrenadores, pongo en lo más alto a Simeone, con personalidad y dispuesto a todo, sin importarle nada. Y quiero que se entienda bien: ni hago de menos a Luis Enrique –con muchas estrellas en su firmamento azulgrana-, ni a Benítez -con otras tantas en el universo blanco-. Es que el Cholo mueve sus fichas de forma más libre, más fresca (aunque a veces le cuesta demasiado)… Él es la estrella y punto. Nada que salga de su pizarra, ni de la del ‘profe’ Ortega, creará una crisis, ni interna ni externa y eso es llevar mucho camino recorrido.

Va a ser un año de rotaciones y de muy buena preparación física, estoy seguro. La exigencia del calendario es máxima y no cabe otra que tener al mayor número de jugadores enchufados. El que lo logre de verdad, saldrá con ventaja. El once titular será relevante, pero los cinco, seis cambios más frecuentes deberán mantener el nivel físico, táctico y futbolístico.

Un reto para los entrenadores y para los jugadores, que deberán estar más pendientes de su nivel de cumplimiento que del reloj. A Paco Jémez, al que admiro, lo dejo fuera de concurso en este sentido. Es capaz de hacer rotaciones y los tres cambios en un ‘pis-pas’. Y si tiene que tirar de un juvenil, lo hace. No sé si se trata de eso, pero lo que tengo claro es que esta Liga 2015/16 no se va a resolver sabiéndonos los onces de memoria.